La adopcion no es un tema fácil de abordar. No lo es por diversas razones. La principal, es que frecuentemente ocurre dentro de un contexto familiar complejo, envuelto en situaciones dolorosas y emociones encontradas. Y no es para menos: muchas de las experiencias que narran la trama de una adopción tienen que ver con el abandono, la infertilidad, la pérdida y el duelo. Sin embargo, también hay otra cara, tan importante como la anterior, y que muchas veces queda relegada a un segundo plano, a la sombra de la tragedia. Se trata de la cara opuesta de esa tragedia: una historia de esperanza, de amor, de encuentro. La adopción, entonces, revela historias profundamente humanas, con todas las aristas que pueden estas tener. (…) Detrás de una adopción no siempre hay una familia que abandona y otra que recibe voluntariamente. Muchas veces los hechos se suceden de formas tan intrincadas e inesperadas que trascienden incluso a los mismos protagonistas de las historias. Y ese es el peligro de no abordar temas difíciles como este: se corre el riesgo de que muchas verdades queden ocultas y de que muchas personas no sean conscientes de su propio pasado y de su origen.
Algunos fragmentos con los que comienza el libro «La hija» de Florencia Alifano , novela basada en una historia real, declarada de interés por el Ministerio de Cultura de la Nación.